No pude evitar nacer

Queridos hermanos: 

                                Yo no quise que todo lo que pasó pase, yo no quise ser la prueba de una infidelidad, no busqué nacer en esas condiciones pero pasó, nací y ahora intento vivir sin sufrir por el rechazo que me hacen pero cuando hay reuniones no puedo, porque el rechazo se siente en cada parte de mi cuerpo, me penetra y se queda generando en mi una incomodidad oscura y desafiante, oscura porque me aterra hablar y desafiante porque me pararía y me iría, dando una única explicación y diciendo dos horribles palabras: me odian. Sé que piensan que no me afecta sólo porque sufro en silencio, jamás me van a ver llorar delante de ustedes por lo que hacen. Siento que ninguno de los que me rodean pueden entenderlo y cuando digo lo que siento me dicen que soy yo la que se aleja, y así generan en mi una impotencia y una rabia que me hace querer desaparecer pero no puedo hacerlo, no puedo esconderme y no salir porque eso no sirve porque no los calmaría ya que lo único que quieren, y es lo que no se puede, es que yo jamás hubiese nacido. Por eso les pido perdón, no pude evitar nacer, no estuvo en mis manos.

Libertad, de eso se trata esta nota, de eso se trata mi vida. ¿Cuándo perdí mi libertad o cuándo se la sacaron a los demás? ¿Quién te hizo pensar que haber estado juntos un tiempo te iba a dar el derecho de decirle a los demás que no se metan conmigo? ¿Acaso no fui clara cuando dije que se había acabado, que quería seguir mi vida, que no sentíamos lo mismo? Al parecer no lo fui y hoy estoy pagando el precio de haberme metido con vos y no es que me arrepienta pero odio que me saquen la libertad, sacándosela a otra persona también es sacármela a mi porque le estás prohibiendo hacer algo que yo quiero y sé que él también lo quiere. No entiendo quién te dio permiso para hacer todas esas cosas, no logro comprender si tanto me queres por qué no me dejas ser.