miércoles, 10 de noviembre de 2010

Me tocó un amor obsesivo, perjudicial. Me tocó tocar la muerte tan de cerca hasta perderle el respeto. No me asusta morir: me aterroriza seguir despierta. Me pregunté cuántos años más voy a vivir, no por miedo a desparecer sino hasta con necesidad de ello


No hay comentarios:

Publicar un comentario